Durante este último mes, en mi casa hemos tomado decisiones importantes, como por ejemplo, cambiar el look de mi cuarto (mío y de mi hermana of course).
Después de una excursión a IKEA la semana pasada, a la cual yo no fui (jum), gracias a la cual se adquirieron una lámpara maravillosa (pero sin genio) y dos cómodas maravillosas también. Este sábado, llegó el momento “bricomanía”.
A las 6 de la tarde mi padre se dispuso a colocar la lámpara, que si antes de ser montada era maravillosa, tras la colocación se convirtió en “super super maravillosa”. Y después de esto… procedimos a montar las dos cómodas, como si de un puzle se tratara.
Al principio mi padre y mi hermana acapararon todo el trabajo, dejándome el trabajo sucio, como colocar los tornillos horribles, pero en el montaje de la segunda cómoda, sí me dejaron.
Hay que reconocer que clavando puntillas no tengo precio, soy un “genio”, entre las que se doblaron, la que se clavó mal, y que no tengo puntería… Eso sí, tengo un “método” para colocar los tornillos con su palanquita (que sí, que tendrá un nombre, pero para mí eso era una palanca), que creo que voy a patentar.
En fin, el resultado lo mostraré más adelante porque no tengo batería en la cámara de fotos (típico de mi).
P.D: Siguiente paso, pintar las cómodas y montar las literas.
3 comentarios:
Vas a poner literas??? woooooow seguro que queda genial el cuarto :)
llaves allen!!!!!
Ya... sí... eso mismo...
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